Opinión: El séptimo hijo, la película

El séptimo hijo es una película que está basada en el primer libro de la saga El aprendiz del Espectro de Joseph Delaney.

Durante el transcurso de la historia, Thomas (Ben Barnes –El retrato de Dorian Gray–) deberá aprender cómo luchar contra seres sobrenaturales como brujas, boggarts y todo tipo de criaturas sumamente poderosas.

Thomas tendrá un instructor muy prestigioso, el Espectro (Jeff Bridges), quien le brindará al protagonista los conocimientos para poder defenderse en este mundo donde todo parece ser posible.

El argumento de la película es muy ganchero y tiene ese “alma juvenil” que a todos nos gusta encontrar en las historias. El joven protagonista debe abandonar su hogar cuando el Espectro lo visita, ya que Thomas es el séptimo hijo de un séptimo hijo, en otras palabras, su suerte ya está echada.

Durante el transcurso de la película, vemos cómo Thomas y su instructor se van enfrentando a distintos contrincantes, pero su mayor enemigo es una Bruja, La Bruja, Madre Malkin (Jualianne Moore).

Bueno, no quiero haber mucho más sobre el argumento, porque prefiero que eso lo descubran cuando vayan a ver la película. De lo que sí quiero hablar es de las cosas que me gustaron y de las que no.

El séptimo hijo es una excelente si la vemos como lo que es, es decir, una película. Si la vamos a ver como adaptación cinematográfica tiene algunas fallas (quizás demasiadas a nivel argumental, ya que ocurren muchas cosas que en el primer libro de la saga no pasan). Pero, como ustedes ya saben, me gusta separar las cosas.

Creo que el equipo de producción supo tomar la esencia de la novela de Delaney y quedó perfectamente plasmada en la gran pantalla, pero, por otro lado, hubo cosas que a algunos espectadores le molestaron, como por ejemplo, el protagonista. Si leyeron el libro, sabrán que Thomas tiene 13 años mientras que en la gran pantalla es mucho mayor. Luego, con respecto a las brujas, hubo algunas modificaciones en el hilo argumental, pero no voy a decir qué, porque les arruinaría la peli.

Más allá de las discrepancias que acabo de mencionar, quedé muy conforme con el resultado final. Los actores me gustaron mucho, las performances estuvieron impecables. Hubo varias escenas de humor que le dieron un toque especial a la cinta y, como muchas esperaban, hubo alguna que otra escena romántica (en el libro fue más naif, pero también había un pequeño romance presente).

Por otra parte, quiero destacar la parte estética de la película, el look que tiene en general –al mejor estilo Burton–. Fue una de las cosas que más me gustaron porque, con el toque que le dieron, representaron ese mundo fantástico que yo me había imagino mientras leía el libro.

El séptimo hijo es una película que te atrapa de comienzo a fin, llena de magia, enemigos espeluznantes y un  héroe como pocos.

¿Ya la vieron? ¿Les gustó? ¿Leyeron el libro?